Llevamos una semana con el nuevo horario de verano en 2024. He decidido aprovechar que las tardes son más largas para hacer los entrenamientos deportivos de lunes a viernes a última hora de la tarde en vez de a primera hora de la mañana, con lo que en vez de levantarme a las 5:00 ahora lo hago a las 6:00. Biológicamente, sería la misma hora que antes, con lo que el impacto, en principio debería ser menor. Además, aprovechando esto mismo, he decidido apuntarme al gimnasio en el polideportivo municipal, actividad que me incluye 2 horas diarias de pista de atletismo. De manera que mi rendimiento deportivo debería mejorar bastante.
En mi primera semana de prueba, el aspecto que más se ha resentido ha sido precisamente la escritura. Los cambios, el cansancio inevitable por el nuevo horario y otras obligaciones diarias que han ido surgiendo han dificultado mi propósito esencial. Concluyendo, fue una semana sin avances de escritura. Menos mal que el borrador de mi libro de relatos de terror está concluido. Esta semana toca hacerme definitivamente con la situación y avanzar. Sí o sí.
Añadir comentario
Comentarios